Fuego vivo, jóvenes hagamos lio en el Quindío
En el colegio San José de Armenia de los
hermanos maristas, con la compañía de 150 jóvenes de las diferentes parroquias
de la Diócesis y esa fuerte exclamación del lema: “Pentecostés juvenil
Diocesano, fuego vivo, jóvenes hagamos lio de Fe en el Quindío”, celebramos esta
fiesta de Pentecostés, la venida del Espíritu Santo sobre todos nosotros y
rogamos que venga sobre toda su Iglesia, que la renueve y la mantenga siempre
joven, Cuando el Espíritu Santo descienda
sobre vosotros, recibiréis fuerza para ser mis testigos; Hechos de los Apóstoles
1, 8.
Con un caloroso abrazo de parte del
padre Cesar Castaño director de la pastoral juvenil, nos daba la bienvenida a
todos los participantes, a ejemplo de un Jesús joven, me imagino a ese Jesús
joven lleno de alegría, de fe, de respeto por los demás y de obediencia; A
pesar de la lluvia y el cambio oportuno del ambiente para realizar el encuentro,
lo cual no le resto valor ni entusiasmo a la tarde, con mucha alegría se entonaron
himnos para la gloria de nuestro Dios, como respuesta se danzo al compás de los
ritmos para agradar a nuestro Dios en las alturas, se oró para dar inicio como
tal a la asamblea juvenil, se reflexionó, sobre el fuego vivo, sobre el amor de
Dios, sobre la venida del espíritu santo, sobre sus dones y sus signos; El
Espíritu del Señor que viene, que vendrá siempre que le invocamos con sencillez
de corazón, nos guiara hacia la verdad de nuestras vidas. En el día a día
iremos reconociéndolo, porque Él siempre está ahí con nosotros siendo Espíritu
de fe en la oscuridad, Espíritu de victoria en la debilidad, Espíritu de
alegría en las lágrimas, Espíritu de vida eterna en medio de la muerte, porque
tenemos un Dios vivo dador de vida; En seguida nos fraccionamos en pequeños grupos,
para realizar la actividad de deliberar sobre los dones del Espíritu Santo y
formular una porra, que consistió en usar organizadamente algo de música, o baile,
o acrobacia, con dicha animación, nos llevó a dinamismos y acciones donde se evidencio
la impresionante creatividad de los participantes, las porras cumplieron su objetivo
en animar al público y a los diferentes equipos partícipes; Presenciamos una
obra de teatro muy seria y con sentido muy espiritual, donde nos invita a tener
un cambio de actitud, a recibir el espíritu de Dios, de amor, que abramos las
puertas de nuestro corazón a Dios, para dejar el miedo a este mundo, para no
encerrarnos en nosotros mismos o en nuestro grupo, si no llenos de Dios, abrir
el corazón a los demás, trasmitir ese espíritu de amor de Dios, no nos dejemos
arrastrar por las costumbres ni por las represalias, no tengamos miedo de agrietar
nuestro corazón y nuestra boca para anunciar a nuestro Señor Jesucristo con la
fuerza del Espíritu Santo. Así al finalizar la jornada todos marchamos de
regreso a nuestros hogares renovados por el espíritu santo. Dios les bendiga,
hasta pronto.
Armando
Arboleda González
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